2da fecha - Fascículo para coleccionar

HOY LECHON 6 - 5 CACHENGUE F.C.

Hace un poco más de un año que estamos jugando en las ligas de EDEBA, jugando partidos que pasan sin pena ni gloria y de los otros. Esos que cuando lo contás no te lo creen. Esos que si lo cuentan en una película, pensás que siempre gana el "muchachito" y que siempre tiene un final feliz. Esos que parecen sacados de un ejemplo de un curso de liderazgo o trabajo en equipo. Esos partidos en los que entendés por qué te gusta jugar al fútbol.

El domingo pasado era una fecha especial, era la segunda de la etapa “Campeonato” de la liga E donde están los mejores de los equipos nuevos. Se había ganado la primera fecha sin que sobre nada. Ramiro (Líder espiritual, técnico y administrativo) ya había empezado su recorrido por el viejo mundo. Julián estaba fuera de la convocatoria por otros compromisos. La Narva, con gripe (no se comprobó que sea del tipo N1H1) venía complicado y no llegaba para el domingo. La Pulga, sufrió la pérdida de un ser querido (NdeR: te mandamos saludos) y tampoco concurrió a la cita.

Los ocho valientes que salieron a la cancha fueron entonces, los siguientes:
1- Nacho (debut)
2- Willy
3- Walter
4- Pucho
5- Mora
6- Sebas
7- Mono
8- Coco

Con un esquema (3-2-2) sin volante de marca, y con cuatro fantásticos en el ataque. De arranque parecía que podríamos sufrir goles, pero seguro que podíamos a hacer muchos.

El partido comenzó, y una de las expectativas del párrafo anterior se cumplió, recibimos dos goles y no nos encontrábamos en la cancha. Llegó el descuento, pero antes del cierre del primer tiempo, también llegó el tercero de ellos.

En el segundo tiempo, salimos con un esquema distinto a buscar el partido (2-3-2) y la mano empezó bien porque conseguimos descontar nuevamente. Algo que duró poco porque Cachengue metió dos pepas más y la cosa se ponía muy difícil (2-5).

En este momento se pueden enumerar muchas características de equipo, como solidaridad, esfuerzo, empuje, incentivo para alcanzar el objetivo; pero futbolísticamente se puede decir que con mucho huevo lechón, empezaron a caer los goles (Sebas, Coco, Mono y Walter en tres oportunidades) para dar vuelta la historia, y a poco del final ponerse arriba en el tanteador.

Pero como no puede ser simple la historia, se adicionaron 3 (tres) minutos. El Mono pegó un par de patadas y se fue expulsado. Coco no quiso ser menos y se llevó su tarjeta roja. Los que quedaron no salían del área para defender una victoria muy “lechona”, de esas que había pedido Ramiro antes de irse. De esas que vamos a recordar cuando nos juntemos. De esas que vamos a contar y nadie nos va a creer. De esas tan lindas que tiene el fútbol.

Dimos (más bien, dieron) el segundo paso, faltan siete; pero primero lo primero: el próximo sábado al mediodía en Terraza.